Sobre la naturaleza y el arte del amor romántico

Como hoy se celebra San Valentín, patrón de los enamorados. Una fiesta que da mucho que hablar, para unas personas es el día para celebrar su amor de manera especial, para otras es una celebración del amor romántico, para otras es una fiesta comercial y para otras un infierno… 

Me parece la ocasión perfecta para escribir sobre la naturaleza y arte del amor romántico y de sus mitos. Todas las personas tenemos nuestras opiniones, nuestros introyectos sobre ello y lo malo es que alguna de éstos nos hacen sufrir más de la cuenta… A continuación desarrollo algunas de esas creencias y quizás las puedas reconocer en ti. 

“La creencia no es el principio, sino el fin de todo conocimiento.” 

Johann Wolfgang von Goethe

Existen personas que piensan que están predestinadas a conocer su “media naranja”

Pues sí, aún existen personas que creen que elegimos a la pareja que de alguna manera «tenemos» predestinada y que, en el fondo, es la única elección posible. Como también las hay que creen que es necesario el amor de pareja para sentirse completo/a en la vida. 

Generalmente, este mito está asociado a que sólo hay un amor “verdadero” en la vida es decir, creer que «sólo se quiere de verdad una vez y, si se deja pasar nunca más se volverá a encontrar»… y por supuesto, para ellas, habrá una 

pasión eterna o equivalencia que defiende que el amor romántico y pasional de los primeros meses de una relación puede y debe perdurar tras años de convivencia; y el sentimiento de amor y el enamoramiento pasional son «equivalentes».

Somos seres completos y el sentimiento de amor, se construye poco a poco y no siempre ha de haber super pasión al principio… si lo hay, guay.

Algunas personas piensan que «El Amor todo lo puede»

Digamos que una persona ha encontrado a su “pareja ideal” y entonces se imagina o se cree que “el amor lo puede con todo”. 

¿Realmente el amor lo puede todo? ¿El amor es suficiente para superar todos los obstáculos que surgen en una relación? Hay comportamientos que son ofensivos y que no cambian porque el otro “te ama”. Y no hay porque tolerar y aceptarlos. 

Es como eso de que no hay amor verdadero sin sufrimiento, pues no… no hay porque sufrir, ni aguantar o perdonar todo… esta creencia, en muchas ocasiones da pie a que se justifique el maltrato, a la utilización de argumentos basados en el chantaje con el que manipular la voluntad de la pareja (víctima) imponiéndole sin consideración alguna los criterios propios: «si no me perdonas, es que no me amas de verdad». 

Y claro como el amor todo lo puede, también existe esa creencia en que los polos opuestos se atraen. La realidad parece demostrar que cuantas más cosas se tienen en común, mejor se entienden las parejas.

También hay quien piensa que la naturaleza del amor es omnipotente

También hay algunas personas que se creen que el amor es lo más importante y requiere entrega total. O sea que hay que poner en el centro el amor de pareja, relegando todo lo demás en la vida y entendiendo que sólo se puede ser feliz en la vida si se tiene pareja. Claro porque según esas personas la capacidad de dar felicidad se le atribuye por completo a la pareja. Y una se funde con el otro y se olvida de la propia vida, dependiendo de la otra persona y adaptándose a ella, postergando y sacrificando lo propio sin esperar reciprocidad ni gratitud. 

Hasta existe en algunas personas la creencia de que si se ama debe renunciarse a la intimidad no pueden existir secretos y la pareja debe saber todo sobre la otra parte.

Y de ahí que exista la creencia que el amor romántico y pasional debe conducir a la unión estable, al matrimonio. Y que si no existen celos pues no hay verdadero amor, o sea que para estas personas el amor es posesión.

En fin eso no es amor… 

Si te has reconocido en algunos de estos puntos y quieres ampliar tu visión del mundo y crear la relación de pareja que anhelas no dudes en ponerte en contacto conmigo. Te acompaño a ir a por lo que necesitas y a gestionar tus emociones.